La ACPT recopila 500 alegaciones contra la ordenanza de la OLA en Torrelavega
En la mañana del lunes la ACPT ha registrado las alegaciones que ha venido recogiendo en las diferentes mesas que instaló recientemente en las calles de Torrelavega. La plantilla de alegación, que ha sido apoyada -y en numerosos casos mejorada-por las cerca de 500 personas, se basa, entre otros argumentos en tres cuestiones principales:
Torrelavega sufre un problema grave de aparcamiento con un déficit de 1800 plazas, que es el resultado del número de vehículos matriculados en el municipio, menos el número de plazas públicas o privadas existentes en la ciudad. Este problema solo se soluciona con la creación de nuevas plazas de aparcamiento, algo que no resolverá ni la OLA ni la ERA, ya que con ellas no se creará ni una sola plaza de aparcamiento más.
Tal y como recoge la ordenanza, las plazas de aparcamiento designadas para la ERA, serán las plazas que actualmente están reservadas para Carga y Descarga, limitando el horario de las cargas y descargas de ocho de la mañana a once. Esta medida producirá un grave problema de circulación en Torrelavega, pues la gran mayoría del comercio no abre sus puertas antes de las nueve y media de la mañana, además cada vez hay una mayor demanda entre la población para recibir compras y pedidos, con lo que el número de repartidores está creciendo en la ciudad, por lo que dejarles sin plazas de aparcamiento a partir de las once de la mañana va a significar que se vean muchas veces obligados a tener que aparcar de forma irregular, entorpeciendo la circulación y provocando un problema circulatorio donde ahora no existe.
Además, el Ayuntamiento de Torrelavega tiene encargado un estudio para la implantación de las Zonas de Bajas Emisiones en la ciudad, norma que tiene como objeto impedir el acceso al centro de la ciudad de todo vehículo que no sea considerado vehículo de bajas emisiones. La zona que está llamada a ser ZBE, es en la misma que se quiere implantar la ERA, por lo que no tiene mucho sentido regular el aparcamiento en aquellas zonas donde en breve tiempo la gran mayoría de vehículos que circulan tendrán prohibido el acceso.
Por otro lado, la ACPT recuerda que durante todos los meses en que se ha estado hablando de esta impopular medida, el Ayuntamiento de Torrelavega ha evitado explicar que es solo una burda ocurrencia que pretende detener -de forma desacertada- la sangría económica de 400.000€ que ya ha costado a las arcas municipales (y una reclamación pendiente por importe de 2.000.000€) el convenio firmado por Francisco Javier López Marcano, padre del actual gobernante, para la explotación del aparcamiento de la Llama.
La ACPT es consciente del grave problema de aparcamiento existente en Torrelavega. Problema para el que vienen reclamando y aportando soluciones desde hace varios años y para el que aseguran rotundamente que pagar por aparcar no será la solución. De hecho, la ACPT considera que la OLA será la puntilla definitiva para la ciudad, pues tienen claro que en el momento que las familias trabajadoras, tanto del municipio como de la comarca, tengan que pagar por aparcar, el comercio de Torrelavega dejará de ser destino habitual en beneficio de las superficies comerciales de la periferia y de Santander.
Reiteran que la imposición de la regulación del aparcamiento mediante la OLA no solucionará los problemas de aparcamiento de Torrelavega, al no crear ésta absolutamente ninguna plaza nueva de aparcamiento. De hecho, la situación que arrastra la ciudad con el problema de aparcamiento viene provocada por el déficit de plazas disponibles para residentes, dato que la ACPT ha calculado en aproximadamente más de 1700 plazas (diferencia entre plazas disponibles y vehículos).
La ACPT sigue viendo imprescindible y exigiendo que se abra un verdadero proceso de debate en la ciudad en torno al problema de aparcamiento existente en Torrelavega, donde se evalúen detenidamente las distintas alternativas con sus pros y sus contras:
Un debate sincero, sereno y sin condicionamientos.
Y ese debate, a juicio de la ACPT, debe culminar con una consulta popular, tal y como recoge el Reglamento Orgánico de Participación Ciudadana de Torrelavega, siendo los vecinos y vecinas quienes decidan realmente qué medidas aplicar para solucionar el problema de aparcamiento de la ciudad.