Primeros datos del Atlas de las aves de Torrelavega

Se trata de una actividad enmarcada dentro del proyecto ‘Torrelavega Conexión Natural’. Se han detectado 90 especies de aves, entre ellas el azor, el chortilejo chico, el pico menor o el picamaderos negro

Coincidiendo con la celebración del Día Mundial de las Aves, el pasado fin de semana, desde el Ayuntamiento de Torrelavega se han dado a conocer los primeros datos del Atlas de las Aves reproductoras del municipio que se está realizando dentro del proyecto ‘Torrelavega Conexión Natural’.

 

Según han informado el alcalde, Javier López Estrada; y la concejal de Medio Ambiente, Patricia Portilla, estos primeros resultados del estudio, realizado por SEO/BirdLife, han sido “muy positivos”. Se han detectado más de 90 especies de aves en Torrelavega, de las cuales al menos 75 podrían estar reproduciéndose en el municipio. Esta gran diversidad se debe a la variedad de hábitats que tiene Torrelavega, desde el casco urbano hasta las zonas periurbanas, pasando por las masas arboladas y las cumbres de la Sierra del Dobra. También son importantes los cursos fluviales, que en los últimos años han “mejorado su calidad y son una fuente clave de biodiversidad”.

 

En opinión de López Estrada y Portilla, estos datos no solo resaltan la “riqueza natural” del municipio, sino que también ayudan a entender el estado de nuestro medio ambiente, ya que las aves son un excelente indicador de su calidad. El atlas, han afirmado, permitirán tomar medidas más precisas para proteger las especies más vulnerables.

 

Asimismo, tanto el alcalde como la responsable de Medio Ambiente han querido destacar la participación de voluntarios en este estudio, cuya colaboración ha sido “fundamental” para obtener datos valiosos.

 

PRIMEROS DATOS ESTUDIO

 

De las 90 especies detectadas, las dos terceras partes corresponderían al grupo de los paseriformes, lo que coloquialmente se denominan “pájaros” dentro de los que podemos encontrar a los gorriones comunes, las golondrinas o a la urraca. Las aves más abundantes han sido: el mirlo común, la curruca capirotada, el chochín paleártico, el carbonero común, el jilguero europeo y el petirrojo. Dentro de las aves nidificantes más escasas, se han encontrado el azor, el chorlitejo chico, el pico menor o el picamaderos negro. Y otras que en el pasado fueron más abundantes y cuyas poblaciones precisan de un seguimiento, como son el colirrojo real, la tórtola europea o el alcaudón dorsirrojo que, aunque se han reportado una docena de registros, fue en el pasado un ave realmente abundante en la campiña torrelaveguense, habiendo perdido una importante parte de su población.

 

Respecto a la metodología utilizada, han explicado, que se ha dividido la zona de estudio en 183 cuadrículas de 500 x 500 metros, realizando en cada una de ellas un exhaustivo muestreo de las especies reproductoras. También ha sido importante la colaboración de voluntarios, que han aportado datos de gran valor.

 

Este estudio, que utiliza las aves como indicador de la calidad ambiental, se está llevando a cabo dentro del proyecto Torrelavega conexión natural, financiado por la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición ecológica y el reto Demográfico (MITECO), en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión europea-NextgenerationUE. El proyecto está coordinado por el Ayuntamiento de Torrelavega y cuenta como socios para su desarrollo con SEO/BirdLife y con el Centro Especial de Empleo SERCA.