Fermín Molino, nombrado Hijo Predilecto de Astillero ante centenares de vecinos

El municipio ha rendido homenaje al fotógrafo con un emotivo acto, la inauguración de su exposición fotográfica y la designación de un nuevo espacio expositivo que lleva su nombre

El municipio de Astillero ha rendido hoy un emotivo homenaje a Fermín Molino, quien ha sido nombrado oficialmente Hijo Predilecto en reconocimiento a su incansable labor como cronista visual del patrimonio histórico y social del municipio.

 

El acto, celebrado en el Edificio del Mercado, ha reunido a más de 300 vecinos y personalidades que han querido mostrar su admiración y gratitud a Molino por su contribución a la memoria colectiva de Astillero y Guarnizo. Entre los asistentes, además del actual alcalde, Javier Fernández Soberón, han estado presentes antiguos regidores del municipio como Carlos Cortina e Ignacio Diego, quienes han querido acompañar al homenajeado en este día tan especial.

 

Durante el evento, Fermín Molino ha recibido el diploma distintivo de Hijo Predilecto, así como la medalla honorífica del municipio, en medio de un caluroso aplauso por parte de los asistentes. El alcalde ha destacado en su intervención que “este reconocimiento es una muestra del cariño y la admiración que le profesa su pueblo, por haber dedicado su vida a capturar con su cámara la esencia de Astillero”.

 

Emocionado, el homenajeado ha tomado la palabra para agradecer al pueblo de Astillero por este reconocimiento: “Es un honor recibir este cariño de mis vecinos y el apoyo de las corporaciones locales, todo esto ha sido un reflejo del amor que siento hacia el pueblo”. También ha dedicado unas palabras a su familia, destacando su apoyo incondicional a lo largo de los años.

 

El homenaje ha continuado con la inauguración de la exposición fotográfica de Fermín Molino en el nuevo espacio expositivo del Edificio del Mercado, que, a partir de ahora, llevará el nombre del homenajeado. La muestra recoge una selección de sus imágenes durante las fiestas de San José de Astillero hasta 2003.

 

El acto ha finalizado con un vino español, en el que vecinos, familiares y amigos han compartido recuerdos y anécdotas sobre la trayectoria de Molino, poniendo de manifiesto el profundo aprecio y gratitud que le guarda el pueblo de Astillero.