La formación morada pide al Gobierno de Cantabria que luche por la ejecución de su Plan de Reindustrialización Sostenible de las comarcas de Besaya y Campoo, que cuenta con el visto bueno del Congreso de los Diputados desde 2018

Santander, 4 de marzo.-  Podemos ha solicitado al Gobierno de Cantabria, en especial a su consejero de Industria, el señor López Marcano, y a las fuerzas políticas con representación en el Parlamento Autonómico que centren lo que resta de legislatura en hacer realidad el ‘Plan de Reindustrialización Sostenible de las comarcas de Besaya y Campoo’ elaborado por la formación morada y que cuenta con el respaldo del Congreso de los Diputados desde hace más de tres años.

Luis del Piñal, coordinador de Podemos Cantabria, pide que “haya unidad” en una cuestión en la que “los cántabros y cántabras nos jugamos el futuro de nuestra tierra y el de las generaciones venideras”. Además, cree que “tal vez si no hubiéramos perdido décadas en pedir un AVE que nunca llegará y nos hubiéramos centrado en que se ejecutara este Plan de Reindustrialización, ahora Cantabria podría tener unas cifras de producción económica y renta a la cabeza del país”.

Este plan industrial, que podría estar financiado gracias a los fondos europeos de recuperación y resiliencia, propone destinar 30 millones a ayudas para la modernización de industrias en riesgo de deslocalización para la adquisición de maquinaria, patentes o transformación de procesos productivos que permitan incrementar la productividad y competitividad; 30 millones para incrementar la eficiencia energética, la reducción de emisiones y residuos procedentes del proceso productivo; y cinco millones para la búsqueda de nuevos mercados, internacionalización de las empresas, aprovechamiento de cadenas globales de valor y fomento de las exportaciones de bienes y servicios.

Asimismo, plantea otros 50 millones en incentivos para la atracción de nuevas empresas, inversión extranjera directa y participación en sociedades mixtas; 20 millones para el desarrollo de nuevo suelo industrial -"respetando el medioambiente y las zonas agropecuarias"-, y la readaptación del ya existente; 100 millones para mejorar las infraestructuras de transportes para reducir el coste del transporte de mercancías y evitar colapsos circulatorios motivados por la nueva actividad económica y 15 millones para la atracción del talento, mejora del capital humano y la formación continua de los trabajadores.