“Estamos preocupados, porque pensábamos que el Partido Popular iba a tener el valor de hacer una revolución fiscal, pero se ha quedado en una ‘rebajuca’ que incumple sus propias promesas y nos genera bastantes dudas”. Con estas palabras ha resumido el portavoz parlamentario del PRC, Pedro Hernando, la valoración de su grupo sobre la reforma de impuestos anunciada ayer por la presidenta del Gobierno regional, María José Sáenz de Buruaga, a quien “han bastado menos de 100 días para incumplir su propio programa electoral”.
En una rueda de prensa junto a la diputada y portavoz regionalista en materia de Economía, Paula Fernández, Hernando ha denunciado que la “rebajuca” está basada en datos falsos, ya que en contra de lo dicho ayer por la presidenta “no es cierto” que Cantabria acupe el puesto 17 en el Índice de Competitividad Fiscal de España, sino el 13, ni que vaya a poner 1.000 euros en los bolsillos de todos los cántabros, dado que esa cantidad sólo llegará a aquellos que perciben más de 80.000 euros anuales. “A los demás les van a llegar 100 o menos”, ha precisado.
Frente a los datos difundidos por Buruaga, ha recalcado que la rebaja “afecta realmente a 7.500 cántabros” e incumple los compromisos recogidos en el programa electoral del PP, al limitar la deflactación a los contribuyentes con rentas superiores a 90.000 euros sin incluir “nada” para ayudar a los más desfavorecidos, ni las familias monoparentales, ni las deducciones prometidas por gastos de intereses de los préstamos o seguros privados y la ampliación de los gastos sanitarios a la rehabilitación.
Hernando ha detallado impuesto por impuesto los incumplimientos del Partido Popular, que prometió reducir el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados del 8 al 4% para bienes muebles y del 10 al 8 en inmuebles, pero los ha dejado en el 6 y el 9%, respectivamente, mientras que el tipo reducido del 7% para la compra de vivienda habitual se ha limitado a los primeros 200.000 euros.
Asimismo, ha recordado que el compromiso electoral de Sáenz de Buruaga fue suprimir el impuesto de sucesiones y donaciones entre hermanos, pero la reforma anunciada ayer sólo contempla una bonificación del 50%, mientras que la eliminación del de actos jurídicos documentados ha quedado finalmente en una rebaja del 1,5 al 1%, el segundo. “En todos y cada uno de los impuestos que han tocado han incumplido su programa electoral”, ha precisado el portavoz regionalista.
Con todo, a su juicio “el tema más grave es el IRPF”, ya que representa “el dinero que llega al bolsillo de los cántabros”, y el PP no ha deflactado la base imponible un 10%, como exigía en su etapa en la oposición, sino que ha bajado un punto a las rentas inferiores a 13.000 euros,
“con coste 0, porque no tienen obligación de declarar”, y a quienes ingresan menos de 21.000 euros, pero apenas un 0,1% -“es decir, nada”- a quienes perciben entre 21.000 y 60.000 euros, donde -ha dicho- “estamos todos los cántabros”.
“Y lo que es más grave, han bajado entre 2 y 3 puntos a los que ganan más de 60.000 o más de 90.000 euros; es decir, a los ricos se les da más dinero para que lo tengan en los bolsillos. No sé si la señora Buruaga ha visto la película de Robin Hood al revés, porque no era quitarle a los pobres para dárselo a los ricos, sino quitárselo a los ricos para dárselo a los pobres”, ha ironizado Pedro Hernando.
Del mismo modo y aunque el PRC también defiende su desaparición, ha cuestionado la oportunidad de suprimir en este momento el impuesto de patrimonio, ya que las rentas cántabras que dejen de pagarlo estarán obligadas a afrontar en su lugar el impuesto nacional a las grandes fortunas, por lo que los 20 millones de euros que dejará de recaudar Cantabria irán a parar a las arcas del Estado.
En ese sentido, ha explicado que, en el último año, con el impuesto vigente, ha aumentado el número de ricos en Cantabria, hasta alcanzar un total de 3.025 personas con un patrimonio medio de 2,68 millones, 50 más que el año anterior. Esos datos demuestran en su opinión que el impuesto de patrimonio no ha supuesto la fuga de ningún contribuyente hacia territorios donde se ha abolido el gravamen, dado el impuesto nacional que deben pagar en su lugar.
Paula Fernández ha apuntado por su parte que en este momento no es “necesario, ni bueno” bajar los impuestos, pero dada la decisión del Partido Popular de llevar adelante la rebaja ha exigido que lo haga “bien”.
“No es el momento, pero si son capaces de cuadrar las cuentas para sostener el bienestar de la Comunidad Autónoma, que ésa es la gran cuestión, por favor háganlo bien”, ha pedido la diputada, quien ha defendido que la reducción del 1% en el base del IRPF afecte a todos los tramos de renta, incluida la clase media.
A la espera de conocer en detalle el alcance de la reforma e iniciar la negociación presupuestaria, el PRC ya ha advertido que “no pasará” por una reforma que ignore a la mayoría de los cántabros, ni que genere retrocesos en la financiación de los servicios públicos esenciales y las inversiones que requiere la Comunidad Autónoma. “Si tienen la cuadratura del círculo y lo consiguen bajando impuestos, que lo hagan, ya lo valoraremos a lo largo del año, pero que no nos engañen diciendo que nos bajan los impuestos a todos cuando solo bajan para los ricos”, ha concluido.