La presidenta del PP, María José Sáenz de Buruaga, ha advertido hoy de que con su respaldo a la propuesta de centralización fiscal del ministro Escrivá, el presidente de la comunidad está apoyando que se recorte la autonomía y bendiciendo una nueva subida de impuestos a los cántabros y ha asegurado que, para eso, socialistas y regionalistas van a encontrar la oposición frontal y absoluta de su partido.
La dirigente popular ha anunciado que va a llevar este asunto al Parlamento para que el presidente aclare cuál es su postura sobre la autonomía de Cantabria y la carga fiscal que están soportando las familias y diga si el PRC es autonomista o centralista; si Cantabria es una autonomía o no lo es, y si hay que bajar los impuestos a los cántabros o hay que seguir sangrándoles.
Buruaga ha reprochado a Revilla que una vez más se haya puesto del lado del sanchismo en esa arremetida en bloque contra las comunidades autónomas gobernadas por el PP que, en este momento, son motor de crecimiento económico y creación de empleo precisamente porque bajan los impuestos.
Según la presidenta, lejos de rectificar la política fiscal que viene aplicando en Cantabria durante todos estos años, persevera en el error y respalda una propuesta que equivale a seguir inflando a impuestos a los ciudadanos y engordando la administración.
Para Buruaga, lo que ocurre es que como socialistas y regionalistas no quieren bajar los impuestos en Cantabria, pretenden impedir que los demás los bajen y defienden subirlos en todo el territorio a costa de cargarse la competencia en materia fiscal de las comunidades autónomas.
Pero para la presidenta, lo alucinante es que un dirigente regionalista respalde una postura centralista y abogue por quitar competencias y recortar la autonomía; que esté dispuesto a centralizar la política fiscal y a renunciar a intervenir sobre los ingresos que salen de los bolsillos de los ciudadanos de su comunidad en favor del Gobierno central.
Además, ha llamado la atención sobre la permanente contradicción en la que se mueve el presidente, quien no tiene más criterio político que el oportunismo político y sostener una vez una cosa y otra vez la contraria, porque por la mañana se muestra centralista a tope y seguidor incondicional de la aniquilación de la autonomía fiscal y por la tarde anuncia que está valorando incluir en el programa electoral la supresión del impuesto de patrimonio.
Buruaga ha hecho hincapié en que este anuncio de Revilla es populista porque durante 16 años ha hecho suya la política tributaria de la izquierda y no solo ha mantenido y subido este impuesto cuánto ha podido, sino que siempre se ha posicionado en contra de suprimirlo cuando el PP se lo ha pedido, que ha sido muchas veces.
"Una vez más defiende una cosa por la mañana y por la tarde la contraria como quien está en la barra de un bar o en una tertulia sin ningún análisis y ningún estudio detrás, sin el más mínimo rigor que es como debe hacer los planteamientos cualquier gobernante serio", ha dicho Buruaga, quien ha remarcado que no es serio que su programa para Cantabria dependa de si es por la mañana o por la noche.
Para la dirigente popular, el caos de opiniones del presidente de la comunidad no es más que el síntoma de un regionalista noqueado que está deseando que el árbitro pite el final del partido.
BAJAR LOS IMPUESTOS A TODOS LOS CÁNTABROS
La presidenta ha hecho hincapié en que a diferencia de los que llegan ahora al sprint electoral, el PP Lleva desde el inicio de la legislatura defendiendo la autonomía y sensibilidad fiscal hacia familias y empresas y pidiendo que se bajen los impuestos a todos los cántabros para crecer más y crear más empleo, oportunidades y bienestar, porque con una baja fiscalidad se reactiva el consumo y la economía, se crea empleo, se recauda más y, por lo tanto, se puede invertir más en sanidad, educación y servicios sociales. Como ejemplo, ha citado el caso de Andalucía, que ha aplicado cinco bajadas de impuestos, acaba de aprobar la sexta y ha aumentado en 280.000 el número de contribuyentes y en mil millones la recaudación.
Y ha insistido en que lo más urgente en este momento es deflactar la tarifa autonómica del IRPF para devolver a los cántabros parte de lo que han pagado de más por la inflación.
Para Buruaga, este no es un problema de recaudación, puesto que el Gobierno recibirá el año que viene 258 millones más en entregas a cuenta de los que 167 proceden del aumento de la recaudación por IVA e IRPF, sino de sensibilidad con los cántabros que no llegan a fin de mes.
Ha subrayado que aunque la coalición PRC-PSOE ya ha dejado claro que le importa muy poco que el coste de la cesta de la compra y de los suministros de primera necesidad y de las hipotecas sea ya insoportable, el PP no se resigna y seguirá defendiendo que hay que incrementar de manera inmediata la renta disponible y el poder de compra de los cántabros deflactando la tarifa autonómica del IRPF para todas las rentas inferiores a 60.000 euros como han hecho las comunidades gobernadas por el PP y el País Vasco con el beneplácito del PSOE.
A su juicio, si fueran coherentes, esta es la armonización que deben impulsar, la de la deflactación del IRPF, porque ese es el camino más corto para ayudar a la gente en una situación tan difícil como la actual.
Además, seguirá defendiendo una reforma fiscal para reducir un punto en cada tramo el IRPF, rebajar el Impuesto de Transmisiones, suprimir progresivamente Patrimonio, extender las bonificaciones del Impuesto de Sucesiones y establecer deducciones y bonificaciones para apoyar a las familias vulnerables y a los jóvenes, incentivar políticas de vivienda y generar actividad económica y empleo especialmente en la Cantabria despoblada.
IMPUESTO A LOS RICOS
Buruaga se ha referido también al impuesto a los ricos anunciado por el Gobierno de España y lo ha calificado de pura propaganda interna. “El Gobierno quiere menos ricos, en el Partido Popular queremos que haya menos pobres”, ha dicho Buruaga, quien ha opinado que Sánchez debería explicar por qué lo que rechazó en junio en el Parlamento a iniciativa de Podemos, es una gran idea hoy.
Para Buruaga, esta es una manera de burlar y de anular por la puerta de atrás la supresión del Impuesto de Patrimonio em Madrid y Andalucía. Ese es el objetivo del Gobierno, arrollar a las comunidades que bajan impuestos y evitar que lo hagan, un síntoma del peligroso desvarío en el que vive Pedro Sánchez y su Gobierno, ha concluido.