La delegada del Gobierno en Cantabria, Eugenia Gómez de Diego, y el alcalde de Arnuero, José Manuel Igual, han realizado este miércoles una visita a las obras de refuerzo de las piscinas naturales ubicadas junto a la playa del Sable, una intervención que realiza la Demarcación de Costas para consolidar y mejorar la seguridad de la infraestructura.
La actuación se lleva a cabo tras detectar los servicios técnicos municipales que el muro exterior de las piscinas había perdido su cimiento en la parte central, manteniéndose apoyado solo en los extremos sobre el macizo rocoso circundante, lo que podía hacer peligrar la estabilidad de la estructura. Para solventar esta situación, se ha rellenado el hueco entre la base del muro y el sustrato rocoso mediante un recalce de hormigón.
“Hemos dado respuesta a la solicitud del Ayuntamiento para asegurar estas piscinas naturales, que son un espacio muy apreciado por los vecinos y visitantes de la zona. Con esta intervención, que finalizará esta misma semana, garantizamos la seguridad de los bañistas y preservamos un entorno natural de gran valor turístico y recreativo”, ha destacado Gómez de Diego.
Por su parte, el alcalde de Arnuero, José Manuel Igual, ha agradecido a la delegada del Gobierno que se haya atendido la demanda planteada por el Consistorio. “Para nosotros era una preocupación. Ahora, estas piscinas estarán mejor preparadas para recibir a vecinos y turistas, algo fundamental para un municipio tan ligado al mar como el nuestro”, ha subrayado.
En la visita, además de la delegada del Gobierno y el alcalde, también han participado el jefe de la Demarcación de Costas, José Antonio Osorio; técnicos de este organismo, miembros de la Corporación municipal y responsables de la empresa que ejecuta los trabajos.
Inversión superior a 230.000 euros
El proyecto ha incluido tareas de dragado para limpiar la arena acumulada en la zona, así como la colocación de encofrados y el hormigonado de la base del muro, con el objetivo de dotarlo de una estabilidad duradera. Estos trabajos, que han requerido la intervención de buzos profesionales, se han realizado con un presupuesto de 230.535,70 euros, financiado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, y un plazo de ejecución inicial de tres meses.
Sin embargo, gracias a las favorables condiciones del mar, los operarios completarán la intervención esta misma semana, antes del plazo inicial previsto.
Fue en el año 2019 cuando se iniciaron los trabajos para convertir los antiguos viveros de langosta de Isla en piscinas naturales, una iniciativa del Consistorio financiada por el Gobierno de España que ha despertado un gran interés. Además, de forma complementaria a esta actuación, se ampliaron las zonas verdes y de estancia, y se creó una zona expositiva sobre la historia de estos viveros en la que también se homenajea, mediante un monumento, a las gentes del mar.