Desde la ACPT, afirman que en los últimos días han conocido que desde la alcaldía del Ayuntamiento de Torrelavega se han adjudicado a tres empresas los servicios de conserjería de otros tantos servicios municipales: el archivo municipal, el gimnasio municipal de La Lechera, el CPIT y el centro municipal de formación de Barreda.
Una privatización, según ACPT, decidida de forma unilateral, que afecta a varios puestos de trabajo que, por si fuera poco, están pendientes de cubrirse mediante un proceso de selección pública que se inició hace ya más de tres años y que aún sigue sin terminar de resolverse.
Esto supone para ACPT, años de excusas y mentiras para intentar justificar lo injustificable sobre un proceso de oposición que es evidente que nunca se ha querido que llegue a buen puerto, obviamente porque hay intereses en el equipo de gobierno que van más allá del libre acceso a un puesto de trabajo y la igualdad de oportunidades para todos los vecinos y vecinas de Torrelavega.
Denuncian que ese proceso selectivo, que comenzó allá por marzo de 2019, parece que incomoda y dificulta uno de los principales objetivos que han tenido siempre los dos partidos que actualmente están el equipo de gobierno, que no es otro que utilizar el Ayuntamiento como agencia de colocación de militantes, simpatizantes y pegacarteles agradecidos.
Afirman que se tardará muy poco en empezar a ver, como ha ocurrido en otras ocasiones, a caras conocidas en el pueblo, que integran listas electorales, acuden a los actos a rellenar o se dejan ver por redes como fanáticos defensores. Ir consiguiendo diversos trabajos que deberían ser de libre acceso bien merece esa lamentable implicación…
Mientras tanto, afirman, que a pesar de que se ha creado una bolsa de empleo en la que se supone que bastantes personas que se han formado para el desempeño de las tareas de conserjería, se están entregando esos puestos en connivencia con algunas empresas cercanas, importando bien poco o nada la formación en protocolos o normas de quienes vayan a desempeñar esos cargos que, en entre otras cosas, implican el manejo de información sensible y el acceso a documentación confidencial.
Una desfachatez y una injusticia para las 285 familias que han estado sufriendo un proceso de oposición de más de tres años, que ha sido poco menos que cruel. Y lo peor es que una vez conformada una bolsa de empleo, en sus narices se privatizan varios servicios, riéndose en la cara de todas esas personas que se han esforzado y preparado.
Afirman que entre las empresas adjudicatarias nos encontramos a viejas conocidas como Integra, Andanza Emplea o Ampros, todos “centros especiales de empleo”, una función que ya cumple el CEE SERCA en la comarca y que, sin embargo, interesadamente lo dejan de lado.
Para la ACPT este tipo de prácticas son absolutamente inadmisibles, y aunque cada vez se dificultan más, siguen ocurriendo con absoluta impunidad. Una muestra más de cuáles son los objetivos que tienen el alcalde y muchos de sus concejales: el enriquecerse y beneficiar a sus entornos, mientras Torrelavega se hunde cada vez para una mayoría de la población que no pasa por su aro.