El paso a nivel de Rudagüera retoma el rumbo hacia su desaparición

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Adif y el Ministerio de Transportes han reiniciado las obras, que se habían paralizado por la necesidad de una nueva autorización de Confederación

El paso a nivel de Rudagüera retoma el rumbo hacia su desaparición

Las obras para eliminar el paso a nivel número 61 de la línea FEVE Santander-Llanes, situado en San Pedro de Rudagüera, se han retomado esta semana por parte del Ministerio de Transportes y ADIF, y en los próximos meses se contará con un pequeño puente que permitirá sortear las vías del ferrocarril. Se trata de un proyecto que el Ayuntamiento tiene previsto y viene solicitando desde el año 2012, pero cuya ejecución se ha ido dilatando a lo largo de los años por la larga tramitación y las múltiples autorizaciones sectoriales que ha implicado.

 

Si bien en el mes de noviembre, ya se habían comenzado las labores de limpieza previas en la zona para el inminente inicio de la ejecución de las obras del proyecto de supresión del paso a nivel, la necesidad de unos terraplenes para la ejecución de los trabajos requirió una nueva autorización de la Confederación Hidrográfica, que se tramitó  para una plataforma provisional en la zona del río, que no estaba prevista originalmente, con el fin de hacer los pilotes de la estructura.

 

El alcalde de Alfoz de Lloredo, Enrique Bretones, celebra el reinicio de las obras, y confía en que esta vez sea “la definitiva”, tras distintas conversaciones con el diputado socialista Pedro Casares, quien “ha ayudado muchísimo en esta encomienda para que se aceleraran los plazos”. Además, el regidor ha destacado que esta carretera unirá San Pedro con Reocín. “Es una carretera importantísima y lo que se pretende es que Vías y Obras nos haga un paso peatonal, que continúe desde Villapresente hasta San Pedro”. El regidor también ha recordado la labor de la exconcejala Mercedes Arnaiz, “que estuvo en todo momento pendiente de pedir este puente que evita el paso a nivel”.

 

Las obras proyectadas tienen un  presupuesto de 997.321,49 euros, un plazo de ejecución de 8 meses y se efectuarán por la noche para interrumpir lo menos posible el tráfico de la línea ferroviaria y la vida diaria de los vecinos.

 

 

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